Vuelve el viento con su prisa a escribir en el aire tu nombre,
vuelve con todos los anhelos que se perdieron en el frío polvo del tiempo.
Madrugó de nuevo la palabra que no se pronunció,
suspendida se mantuvo en el silencio.
Cohibida en su manto recubierta de finitas timideces
no llegó a tiempo en su viaje de vuelta del olvido.
Retardada secuencia que en el alma muere sin nombrar, enmudecida.
Pendientes quedan por desempolvar las filigranas muertas.
Con furia desmedida sopla el viento y no respondo a la llamada.
Incapaz de derribar la puerta, enmohecida quedó por las lágrimas derramadas,
de óxido quedó recubierta y ahora permanece blindada.
Su exacerbada furia no conmueve mi voluntad,
con silbidos arrogantes quiere dar muestras de fortaleza.
No conseguirá el dique derribar por mucha furia que lleve impresa.
Ya despertó el alma de la sinrazón, de los momentos de parálisis.
Ya no se inquieta el corazón por ningún nombre que el viento traiga.
Imagen de la red
Comentarios
Publicar un comentario